Qué sabrosa polémica desató Porfirio Muñoz Ledo al cuestionarse cómo se le va a llamar ahora a las personas que viven en la Ciudad de México.
Defeños ya no puede ser, chilangos es muy despectivo y cedemecos por aquello de la CDMX, suena a una frase usada por los abuelos para referirse a la gente "pelangocha".
Mientras que mexicas, como lo propuso Muñoz Ledo, sería un gran homenaje a la tribu que llegó a esta ciudad para formar la gran civilización que ahora somos.