Luego de que el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) aseguró que la Fundación de Cáncer de Mama (Fucam) continuará brindando atención a las pacientes que actualmente tienen un tratamiento oncológico y los nuevos casos diagnosticados en 2020 serán atendidos en otras instituciones de salud, Pamela Cerdeira considera que existe un futuro incierto para miles mujeres.
Ocho mil 500 mujeres que estaban siendo atendidas por la fundación son las que ahora quedarán en manos de instituciones públicas, lo que sería una buena idea si las instituciones se pudieran dar abasto".
Cerdeira dice que con la cancelación del Seguro Popular y sin un acuerdo del Fucam con el Insabi, se abren diferentes preguntas relacionadas con la capacidad de operación de las instituciones públicas para enfrentar la demanda.
Cuando una mujer llegaba a Fucam su tratamiento comenzaba en un mes, ahora hay que ver si estas instituciones se podrán dar abasto".
Y concluye que a partir de acusaciones de corrupción se cierra un programa que estaba funcionando, pero no se castiga a los corruptos:
Se deja al desamparo a ocho mil 500 mujeres".
A través de un comunicado, la fundación explicó que aunque el contrato que autorizaba el presupuesto a Fucam concluyó el pasado 1 de enero de 2020, la fundación trató de continuar brindado su servicio a sus pacientes; sin embargo, los recursos se agotaron.
En nuestra misión de procurar la salud de nuestros pacientes que se encuentran en distintas fases de tratamiento oncológico, Fucam agotó todos sus recursos en un esfuerzo por financiar estos tratamientos, con la esperanza de concretar un convenio con el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), a fin de continuar brindando atención gratuita a la población más desprotegida del país, pero no se concretó una alianza con el gobierno", destacó el documento.