El café que alegra el día de millones de personas alrededor del mundo se obtiene a partir de los granos tostados de la planta de café y, debido a su cafeína es una bebida muy estimulante, razón por la cual, algunas personas sienten como si se aceleraran al tomarlo.
Como una de las bebidas más consumidas del orbe, el café también está considerado como una bebida psicoactiva que afecta la conciencia o actividad mental por su contenido de cafeína.
¿Qué tiene el café?
Las cualidades energéticas del café se deben principalmente a la cafeína que proporciona efectos excitantes en las personas en un nivel seguro dentro de los consumos habituales de ingesta; sin embargo, el consumo de la cafeína al ingerirlo varía de acuerdo con el método de preparación del mismo y la reacción que cada persona puede tener a ella es distinta según el peso, la salud y si se usan medicamentos, entre otros factores.
De acuerdo con la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, se pueden beber hasta 2.7 tazas de café al día, para no ingerir más de 250 mg de cafeína diarios, y si se toma descafeinado se reduce esta ingesta, pero el proceso se hace a costa de las cualidades gustativas de esta bebida, la cual, cuando es descafeinada reduce su sabor.
Un efecto conocido del café es que puede llegar a producir insomnio en algunas personas, por lo que se recomienda no ingerirlo por las noches.
Además, el café puede producir alteraciones nerviosas e incluso existen médicos que prohíben su ingesta en algunos pacientes porque los efectos que produce van directamente al sistema nervioso central, por ejemplo, alguien que padece migraña no debe beber café.
Sin embargo, el café aporta grandes beneficios al organismo y al ser bebido en cantidades moderadas, puede proteger a los adultos de la diabetes tipo 2, enfermedad de Párkinson, enfermedades hepáticas, cáncer de próstata y Alzheimer.
