Día Nacional de la Gastronomía Mexicana: 5 platillos que forman parte de este patrimonio cultural de la humanidad

La gastronomía mexicana fue declarada patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 2010. “Es un modelo cultural completo que comprende actividades agrarias, prácticas rituales, conocimientos prácticos antiguos, técnicas culinarias y costumbres y modos de comportamiento comunitarios ancestrales”, reconoció.
El Instituto Gastronómico Corbusé destacó cinco platillos que forman parte del patrimonio cultural gastronómico mexicano, al que se le reconoce cada 16 de noviembre, fecha en que se celebra el Día Nacional de la Gastronomía Mexicana.
5 platillos destacados en el Día Nacional de la Gastronomía Mexicana
1. Tacos
Se calcula que en México hay más de 115 mil taquerías, de acuerdo con el Mapa del Taco creado por el geógrafo Baruch Sanginés, y según el Inegi, existe una taquería por cada mil habitantes.
La palabra “taco” proviene de la palabra náhuatl ‘tlahco’ que significa “mitad o en el medio”, de acuerdo con el Instituto Gastronómico Corbusé. Su origen se remonta al México prehispánico, y hay dos teorías:
- Moctezuma utilizaba una cuchara de tortillas
- Los trabajadores del campo llevaban su comida envuelta en tortillas. Este alimento es tan popular que el 31 de marzo se celebra el “Día Mundial del Taco”
Fuente: Instituto Gastronómico Corbusé
2. Tamales
Existen diversas variedades de tamal por estado, incluyendo:
- Verde
- De mole
- De dulce
- Rellenos de chocoroles
- Pingüinos
- Gansitos
Fuente: Instituto Gastronómico Corbusé
La palabra “tamal” viene del náhuatl “tamalli” que significa “envuelto”. De acuerdo con Fray Bernardino de Sahagún, los mexicas hacían tamales con carne de pavos, flamencos, ranas, ajolotes, conejos, pescados, calabazas, frijoles y chile.
3. Mole
El Instituto Gastronómico Corbusé destaca que este platillo es el “chile de todos los moles”, está en todas partes: bodas, bautizos, cumpleaños, el pretexto es lo de menos para comer un rico mole.
Además, señala que aunque el más popular es el mole de Puebla, también destacan los de Oaxaca, Veracruz y San Pedro Atocpan en la Ciudad de México.
Su término proviene del náhuatl “molli” o “mulli”, el cual hace referencia a los tipos de salsas preparadas con chiles y especias. Existen dos teorías sobre su origen.
La primera, indica que la creadora del mole fue sor Andrea de la Asunción en un convento en Puebla, quien en 1685 hizo la receta, la cual tenía más de 100 ingredientes, según el Instituto.
La segunda, señala que este platillo se remonta a los indígenas, quienes hacían una salsa mezclada con varios chiles con semillas de calabaza, hierba santa y jitomate, que comían con guajolote, pato o armadillo, de acuerdo con la misma fuente.
Con la llegada de los españoles se agregarían nuevos productos como la pimienta negra, anís y canela.
4. Pozole
El pozole tiene un origen poco conocido. Las versiones indican que los nahuas comían algo llamado “tlacatlaolli”, significa “maíz de hombre”, consistía en un guiso de maíz con carne humana, según el Instituto Gastronómico Corbusé
Se dice que en 1530, el conquistador Nuño Beltrán de Guzmán entró a Tonalá, donde le ofrecieron este platillo, pero al ver la carne rompió la olla y mandó no comer carne humana.
Otra teoría dice que Moctezuma comía algo llamado “Pozotl”, un platillo de la región de Guerrero, al que se le ponía carne de xolochcuintle o venado.
5. Chiles en nogada
La versión más popular y aceptada de su origen es que las monjas Agustinas del Convento de Santa Mónica, en Puebla, hicieron este platillo en 1821, como un homenaje a Agustín de Iturbide por la Independencia de México.
Una más indica que en el ejército trigarante existían tres soldados, cuyas novias vivían en Puebla. Ellas habrían realizado este platillo eligiendo un ingrediente por cada color del ejército, remata el Instituto Gastronómico.



