Alfonso Zayas, reconocido por sus películas de ficheras en la época del cine de oro, estuvo a punto de perder sus “partes nobles” por estar chuleando a una mujer durante el rodaje de una película.
Rosita Pelayo, actriz que compartió créditos en casi 40 ocasiones con Alfonso Zayas y con quien desarrollo un gran amistad, recordó esta anécdota ahora que comenzó el homenaje al cómico en el Teatro Metropolitan.
“La Pelangocha” contó que ambos estaban interpretando a unos judiciales durante una filmación cuando Zayas se dio un balazo al meter la pistola dentro de su pantalón, contó en entrevista para Unotv.com.
“Casi se vuela los testículos, vio pasar a una muchacha y empezó ¡ay qué bonita! y a comérsela con la mirada, tenía una pistola de salva porque estábamos interpretando a unos policías y en el momento en que metió la pistola al pantalón se dio un balazo”, recordó.
Alfonso Zayas, según describió su amiga, no sabía que hacer: “primero se puso blanco, luego colorado y hasta las arruguitas que tenía se le fueron del susto”.
La producción no sabía si reir o llorar, cuando revisaron al actor, Alfonso se había disparado en la ingle y le había quedado “un hoyito del que salía humo”.
“Casi se vuela los testículos con la pistola por estar viendo pasar a una mujer”.
Rosita Pelayo
“Eran unos nalga suelta”: Rosita Pelayo
Rosita Pelayo formó una estrecha amistad con sus colegas Alfonso Zayas, César Bono, Rafael Inclán y Luis de Alba.
“Ellos me cuidaban mucho porque yo era la única mujer de toda la bola e incluso me daban consejos de amor, bastante malos por cierto”, confesó la actriz mexicana.
Le tocó presenciar en repetidas ocasiones lo coqueto que eran Alfonso Zayas y sus demás compañeros, disfrutaba mucho esas pláticas y risas que habían durante el rodaje de cada película: “eran como la tabla del uno, unos facilotes, yo los escuchaba y me daba unas divertidas”.
Añadió que existía una gran hermandad y compañerismo entre todos ellos, pues estaban conscientes de que si todos brillaban la película brillaría más.
“Alfonso y yo siempre estuvimos en contacto”
La relación de amistad de “La Pelangocha” y Alfonso Zayas siempre existió y durante los útlimos años de vida del actor permanecieron en contacto.
“Nos hablábamos por teléfono, él estaba en Cuernavaca y me gustaba molestarlo, hacerlo enojar, era como un gargamel, gruñón pero chistoso, nunca perdió su sentido del humor”.
Rosita Pelayo
“No pudimos despedirnos de la mejor manera, estábamos en plena pandemia y yo estaba internada en cardiología, todos nos lamentamos mucho porque lo amábamos y me da gusto que le estén haciendo su homenaje en el Metropolitan”.