La película mexicana “Los Lobos” del director Samuel Kishi se encuentra nominada a “mejor película iberoamericana” en la 36 edición de los Premios Goya 2022, compitiendo por el galardón contra las cintas: “Canción sin nombre”, de Melina León por Perú, “La cordillera de los sueños”, de Patricio Guzmán, por Chile y “Las siamesas”, de Paula Hernández, por Argentina.
Con un elenco conformado por Cici Lau, Johnson T. Lau, Leonardo Nájar Márquez, Martha Reyes Arias y Maximiliano Nájar Márquez, Kishi narra a lo largo de los 95 minutos la historia de una familia mexicana que migra a los Estados Unidos persiguiendo el llamado “sueño americano”.
Sobre la nominación, el director felicitó a “toda la manada” de ‘Los Lobos’, a través de Twitter.
Desde su lanzamiento, la película “Los Lobos” ha recibido diversos reconocimientos internacionales como el Premio del Jurado Internacional a Mejor Película en la sección Generation Kplus durante la más reciente edición de la Berlinale, y el Premio Especial del Jurado en el Festival de Cine de Friburgo (FIFF).
En cuanto a las otras nominadas que compiten contra “Los Lobos” en la misma categoría de los Premios Goya 2022, “Canción sin nombre”, narra la historia del bebé de una mujer indígena que desaparece al nacer y cómo un periodista arriesga su vida investigar la desgarradora razón, en el Perú de 1988 que se encuentra en estado de emergencia.
“La cordillera de los sueños” busca develar los misterios, reveladores potentes de la historia pasada y reciente de Chile.
Y “Las siamesas”, narra la historia de Clota y Stella, madre e hija que viven solas en un viejo caserón familiar, encorsetadas en una rutina endogámica. Un día, Stella recibe una noticia: su padre ha muerto y dos departamentos pequeños en una ciudad balnearia le tocan como herencia. Stella decide iniciar un viaje para conocer ese milagro que se le presenta como una nueva y última posibilidad de independizarse, pero Clota percibe eso mismo como una separación quirurgica y aterradora.
“Los Lobos”, ¿de qué trata?
“Los lobos” cuenta la historia de los hermanos Max y Leo, de ocho y cinco años, quienes junto a su madre, Lucía, cruzan la frontera entre México y Estados Unidos en busca de una vida mejor. Pero para ellos no es fácil establecerse en un nuevo hogar en Albuquerque, Nuevo México.
Mientras Max y Leo esperan que Lucía regrese del trabajo, los niños exploran a través de la ventana de su departamento el inseguro barrio habitado por latinos y asiáticos; escuchan los cuentos, reglas y lecciones de inglés que ella les deja en una vieja grabadora de cassette, construyen un universo imaginario con sus dibujos y anhelan que su mamá cumpla la promesa de llevarlos a Disneylandia.
La cinta de Samuel Kishi posee, según su director, tintes autobiográficos de éste, ya que en su infancia, migró a los Estados Unidos junto a su madre, para buscar una mejor vida.
“Mi mamá nos dejaba encerrados en un pequeño departamento mientras ella se iba a trabajar. Se grababa con una grabadora de casetes contando historias, cuentos, las reglas de la casa y nos decía: “Pónganle Play si es que me extrañan”. Entonces nosotros lo reproducíamos y empezábamos a construir un imaginario con mi mamá y “la mamá grabadora”, dijo Kishi en una entrevista para el Festival Internacional de Cine de Morelia.