El Paso, Texas, a toque de queda por aumento de COVID-19

El toque de queda en El Paso, Texas, por COVID-19, será desde las 22:00 horas hasta las 05:00 horas del día siguiente. Foto: Reuters.

La ciudad fronteriza de El Paso, en Texas, enfrenta un aumento récord de casos de coronavirus (COVID-19), y se encuentra ahora bajo un toque de queda nocturno, con parques e instalaciones recreativas cerradas durante 14 días, desde las 22:00 horas hasta las 05:00 horas del día siguiente; además, el gobernador Greg Abbott informó sobre un paquete de medidas para contener la enfermedad.

El juez Ricardo Samaniego, del condado de El Paso, Texas, ordenó el toque de queda debido a la crisis de COVID-19. La orden de toque de queda entró en vigor de inmediato, pero no se aplica a los trabajadores esenciales ni a las personas que viajan: “Estamos en una crisis”. Durante las últimas tres semanas, el número de pacientes COVID-19 hospitalizados en el área de El Paso se ha triplicado a un récord de 786, según datos estatales.

  • Este lunes, ese número aumentó aún más, estableciendo un nuevo récord en 853.
  • Así lo informó el periódico El Paso Times, citando datos de salud de la ciudad y el condado.

El doctor Ogechicka Alozie, director médico del Centro Médico Del Sol, aseveró que los médicos en la sala de emergencias, la unidad de cuidados intensivos y en todo el hospital están notando el repunte: “Históricamente, la narrativa ha sido la de mayores de 65 años, aquellos con múltiples comorbilidades. Pero estamos viendo a personas de 20 años. Estamos viendo a personas de 30 y 40 años”.

El Paso y México

La situación es similar al otro lado de la frontera, en Ciudad Juárez, Chihuahua. Con un aumento similar en los casos, Ciudad Juárez también implementó un toque de queda nocturno e incluso prohibió la venta de alcohol durante los fines de semana. El alcalde de Ciudad Juárez, Armando Cabada, por segunda vez, es hospitalizado con COVID-19. El Gobierno de Chihuahua exige compromiso de los ciudadanos.

Mientras tanto, en El Paso, el gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que los funcionarios estatales de manejo de emergencias abrirán un sitio de atención alternativo esta semana, inicialmente con 50 camas, en el Centro de Artes Escénicas y Convenciones. Andrea Cortez, residente de 23 años, que trabaja en una organización sin fines de lucro, espera no volver a enfermarse.

  • Ella estuvo entre los 15 miembros de la familia que se enfermaron en un lapso de 4 semanas desde septiembre hasta octubre. Su abuelo, Lázaro Rentería, de 75 años, no sobrevivió.

La joven agregó en entrevista:

“El día que lo llevaron al hospital cuando dio positivo, fui a visitarlo solo para ver cómo estaba, y le pregunté cómo se sentía. Luchaba por pronunciar las palabras porque tenía dificultades. Finalmente dijo ‘como un campeón’. Así que eso demuestra lo que sentía por el COVID-19 y por la vida porque me lo había dicho antes, así que hizo las cosas un poco más fáciles para mí”.

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