México vive una crisis del maíz en medio de distractores

| 23:14 | Redacción | UnoTV

La analista política Alejandra Cuyen alertó sobre una “bola de nieve” en el sector agrícola mexicano debido a las políticas de control del maíz impulsadas por el actual gobierno. En entrevista con Renato, señaló que México importa cerca del 70% del maíz que consume, cifra histórica que refleja un colapso productivo. Según explicó, esta situación es consecuencia de decisiones como la prohibición del maíz transgénico, la eliminación del glifosfato y la desaparición de la Financiera Nacional de Desarrollo, lo que dejó al campo sin crédito y sin capacidad de recuperación.

Alejandra Cullen subrayó, en Noticias en Claro, que el problema del maíz se agravó porque el gobierno busca “controlarlo todo”, aplicando medidas como los precios de garantía sin tener recursos ni infraestructura para sostenerlos.

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Quieren que los estados paguen parte del precio, pero no hay dinero”, apuntó. Esta falta de planeación ha generado tensión social creciente, con campesinos en estados como Morelos amenazando con destruir carreteras por la falta de apoyo.

La analista comparó la estrategia actual con las políticas económicas de los años setenta, al considerar que “los precios de garantía suenan bien, pero no funcionan en la práctica”, pues los productores grandes quedan fuera y los pequeños enfrentan trámites complicados.

Distractores políticos y riesgo de crisis mayor en el campo mexicano

Para nuestra analista, mientras la crisis agrícola se agrava, el gobierno busca distractores mediáticos con casos como los de Simón Levy o Álvarez Puga, en lugar de atender los problemas estructurales. “Están buscando culpables porque a los de adentro no los pueden tocar”, afirmó.

Agregó que el impacto no solo es económico, sino político y social, pues las decisiones centralizadas “sin dinero y sin resultados” están dejando a miles de productores al borde de la quiebra. “Se destruyeron los mecanismos de apoyo al campo, se prohibieron insumos esenciales y ahora se pretende controlar los precios en un mercado globalizado”, señaló.

Finalmente, Cullen advirtió que estas políticas reflejan “una visión setentera de la izquierda” que no encaja con una economía abierta. El caso del AIFA, dijo, muestra el mismo patrón: decisiones unilaterales que aíslan a México en nombre de la “soberanía”, pero que pueden terminar dejándolo fuera del mercado internacional.

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