Una escena se repite prácticamente por todo Estados Unidos: largas filas de electores depositando por adelantado su voto para las elecciones presidenciales, respondiendo al llamado de movilización de los demócratas y por miedo al COVID-19, a menos de tres semanas de los comicios.
Más de 25 millones de estadounidenses habían votado hasta el viernes, por correo o en persona, según un conteo del US Elections Project, un sistema de estadísticas electorales en línea de la Universidad de Florida.
Estas cifras récord se producen en medio de una elección fuertemente polarizada entre el multimillonario republicano Donald Trump, que se presenta a un segundo mandato, y el demócrata Joe Biden, que actualmente lidera las encuestas nacionales.
¿Qué dicen los expertos en Estados Unidos?
Aunque las cifras están actualmente a favor de Biden, la elección aún no se ha decidido, advierte el profesor Michael McDonald, quien está a cargo del conteo.
Los números en Estados Unidos
En total, 43 estados y la capital federal, Washington, establecieron sistemas de votación anticipada para la elección. Se solicitaron o enviaron casi 75 millones de papeletas por correo, más del doble de los 33 millones para los comicios de 2016, y las autoridades locales establecieron buzones o puntos especiales para depositar el voto.
Estas medidas responden a una fuerte demanda de los votantes, que temen contagiarse de COVID-19 si van a las abarrotadas urnas el día de los comicios.
Por ejemplo, en Iowa, la votación anticipada comenzó el 5 de octubre, y hasta el viernes más de 454 mil electores habían emitido sus votos, según el US Elections Project.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha criticado constantemente el voto por correo, argumentando que conduce a un “fraude de escala sin precedentes” en beneficio de su oponente. Sin embargo, no ha habido pruebas de irregularidades generalizadas en votaciones anteriores.