Baja en remesas deja en riesgo a familias mexicanas: miedo a deportaciones entre las causas de disminución

| 12:45 | José Fernando Franco Gutiérrez | UnoTV | CDMX
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El envío de remesas ha caído en el país. Foto: Shutterstock

Las remesas que llegan a México desde el extranjero, principalmente de Estados Unidos, registraron su sexto mes consecutivo a la baja, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).

Aunque el descenso parece moderado —2.7% mensual respecto a 2024—, sus efectos en cerca de 4.9 millones de hogares pueden ser devastadores, sobre todo en aquellos donde el dinero enviado por familiares en el exterior es el único ingreso estable.

Entre las causas que explican la baja constante del envío de remesas se encuentra el miedo a las deportaciones, las cuales se han incrementado, y a que los migrantes trabajan menos y suspenden sus labores por miedo a ser detenidos, lo que limita su capacidad para enviar dinero.

Causas de la caída

Los envíos desde Estados Unidos han mostrado 20 meses de incertidumbre, con descensos visibles desde noviembre de 2023, incluso antes de los ajustes migratorios recientes.

Entre las principales razones destacan:

  • Menor inserción laboral de nuevos migrantes mexicanos en EE. UU.
  • Aumento de detenciones por parte del ICE, que en marzo de 2025 alcanzaron 19 mil casos, frente a un promedio previo de 8 mil.
  • Política migratoria del presidente Trump, que ha generado un efecto de miedo más que de deportaciones directas.
  • Apreciación del peso mexicano, que desincentiva el envío de dólares al país.
  • Posible impuesto a las remesas, aunque con impacto limitado en México.

Según el Anuario de Migración y Remesas México 2025 elaborado por BBVA, estos recursos representan el 30.5% del total del gasto de los hogares receptores, es decir, casi una tercera parte de su economía doméstica.

En comparación, un hogar que no recibe remesas obtiene el 64.4% de su ingreso del trabajo, mientras que en los que sí las reciben, el empleo solo aporta el 36.3%, lo que evidencia una fuerte dependencia de este flujo de dinero.

Impacto directo en la economía familiar

El análisis de la Dirección General de Estudios sobre Consumo (DGEC) de Profeco muestra que las familias que dependen por completo de las remesas destinan en promedio $2,898 pesos mensuales a alimentos y bebidas, su principal gasto.

En cambio, los hogares donde las remesas representan solo un 60% del ingreso total, pueden incrementar su capacidad de gasto hasta 67% en distintos rubros, lo que demuestra que las remesas funcionan también como un motor de consumo local.

Sin embargo, el descenso sostenido de estos recursos puede provocar que muchas familias “se queden en ceros” al no tener cómo cubrir necesidades básicas o mantener su nivel de vida.

¿En qué gastan las remesas las familias mexicanas?

Imagen: Profeco

Para los porcentajes mostrados se consideró una familia que depende totalmente del ingreso por remesas y otra en la que estas representan el 60% del ingreso total, de acuerdo con estimaciones de INEGI y la ONU.

Toma nota: Es importante destacar que las familias pueden recibir montos superiores por remesas y/o con una frecuencia mayor.

Los estados más vulnerables

La dependencia de las remesas no es homogénea. Chiapas (14.6%) y Guerrero (14.0%) encabezan la lista de estados con mayor exposición a este tipo de ingresos respecto a su PIB estatal, seguidos por Michoacán (11.2%), Zacatecas (10.9%) y Oaxaca (10.3%).

A nivel nacional, las remesas representaron 3.5% del PIB en 2024, lo que refleja su peso en la economía mexicana. Cerca de 4.9 millones de hogares y 11.1 millones de adultos dependen de ellas, según datos del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos CEMLA.

La baja porcentual de remesas no solo significa menos dinero que llega a México: implica menos comida en la mesa, menor consumo y mayor vulnerabilidad social.

En estados del sur y occidente, donde miles de hogares viven gracias a estos envíos, cada punto porcentual perdido se podría traducir en pobreza ampliada y menor dinamismo económico local.

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