Fallas en seguridad permitieron ataque contra Carlos Manzo, revela Raúl Benítez

| 02:02 | Alberto Manuel Rodríguez | UnoTV

El homicidio del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, dejó al descubierto serias deficiencias en los protocolos de seguridad aplicados a funcionarios públicos en actos masivos. Según el experto en seguridad nacional de la UNAM, Raúl Benítez, el ataque fue posible porque “no hubo control de seguridad en los accesos a la plaza”, lo que permitió que una persona pudiera acercarse sin restricciones al mandatario local.

El funcionario era resguardado por 24 elementos: diez policías municipales en su círculo más cercano y 14 agentes de la Guardia Nacional encargados de la seguridad perimetral. Sin embargo, ninguno logró detectar el riesgo ni impedir el ataque, ocurrido durante un evento público en Uruapan, Michoacán.

Fallas en los anillos de seguridad de Carlos Manzo

De acuerdo con Benítez, los dos círculos de seguridad fallaron. “La seguridad perimetral es vigilancia externa, no muy cercana a la persona, para que no se vea rodeado de guardaespaldas… pero en este caso, tanto la seguridad interna como la externa fallaron”, explicó el académico.

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El especialista añadió que no se colocaron cuerdas de seguridad, una medida básica para mantener distancia entre las autoridades y los asistentes.

“No habían considerado un sistema de seguridad más estricto, y eso fue aprovechado por el atacante para acercarse mucho”, señaló.

Además, dijo que el propio alcalde no percibió una amenaza directa, y que confió en exceso en la protección disponible: “Quizá consideró que era suficiente con lo que tenía”.

Otro punto crítico fue la falta de coordinación entre policías municipales y Guardia Nacional, ya que nadie detectó el movimiento del agresor.

“Se ve que no tenían un entrenamiento muy profesional para identificar amenazas”, explicó Benítez, aunque aclaró que no responsabiliza directamente a los agentes, sino a la ausencia de protocolos claros.

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El experto enfatizó que este caso refleja un problema más amplio: en lo que va del año, siete alcaldes han sido asesinados en México. Por ello, urgió al gobierno federal a reforzar la protección a los ediles con personal especializado y sistemas de inteligencia preventiva.