NeuroTips: 3 formas de educar a los niños en Navidad, sin intimidar con Santa Claus

Sofía Díaz Pizarro comparte, en su sección de de Neurotips, tres formas para educar a los niños en Navidad, sin que los papás utilicen la clásica frase intimidatoria en contra de los menores: “Si no me haces caso, Santa no te va a traer tu regalo”.

La comunicadora y especialista en bienestar emocional menciona que ese dicho puede ser el que más daño puede hacer en los pequeños, ya que en el cerebro de un niño se graba como “solo merezco amor, si me porto bien”. La ciencia tiene un nombre para esto, amor condicional. Y eso deja huellas que duran años.

¿Cómo educar a los niños en Navidad?

Sofía Díaz Pizarro destaca un proceso adecuado, desde la neurociencia, para poder educar a los niños en Navidad, sin la necesidad de emplear el hostigamiento verbal:

Identificar el problema y nombrarlo sin juicio

Esto no está bien. Ya sea pegar, comer un dulce ahora, comprar ese juguete. Hay que establecer el límite, frases tipo como “hoy no vamos a comprar ese juguete porque estamos cuidando nuestro dinero, la comida, el tiempo”. Dar el motivo es fundamental. El cerebro entiende mejor cuando sabe el porqué.

Validar la emoción

“Sé que te enoja y que te frustra no tenerlo ahora. Está bien sentirlo. Aquí estoy contigo”.

Ofrecer contención o redirección

¿Quieres que te abrace? “Jugamos con tu carrito rojo llegando a la casa” Hay que recordar reforzar la identidad, no la conducta. No digas, “Si te enojas, santa no viene.” En vez di, “Te quiero, aunque estés enojado.” Esa frase sana generaciones y ayuda a educar a los niños en Navidad.

La Navidad imperfecta

Sofía Díaz Pizarro también comparte consejos prácticos para una Navidad consciente, conectada y memorable. Imaginar “Es Nochebuena. El pavo se quemó. El árbol se cayó hace una hora. Tu hijo mayor derramó el ponche. Tu hija menor está llorando porque no es lo que esperaba”, quizá ¿la reacción instintiva es pensar fracasé?

Aquí está la verdad que nadie cuenta de ese momento caótico, ese momento imperfecto, que es precisamente donde sucede la magia. Porque en ese momento se tiene una opción:

• 1.-Entrar en pánico: gritar, hacer que los hijos sientan que arruinaron la Navidad, enseñarles que el amor y la aceptación dependen de que todo sea perfecto.
• 2.-Respirar: mirar a los hijos, sonreír, decir ‘Bueno, el pavo se quemó, pero estamos juntos’. Eso es lo que importa, y ver cómo sus caras cambian. Cómo se relajan. Cómo sienten que ellos importan más que cualquier comida.

Da clic aquí y ve más ejemplos para tener una gran Navidad en familia, así como un ejercicio de reflexión.

¿Tienes una denuncia o información que quieras compartir? Escríbenos al WhatsApp de Uno TV: +52 55 8056 9131. Tu mensaje puede hacer la diferencia.

Sigue a Uno TV en Google Discover y consulta las noticias al momento