El discurso de AMLO contra la corrupción y la realidad

Javier Solórzano habla sobre el discurso de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) donde la palabra corrupción ha sido una de las más utilizadas, sin embargo, la “terca realidad” está cada vez más cerca.

Nuestro analista explica que AMLO ha tenido el discurso de la lucha contra la corrupción Obrador no sólo en la campaña sino como lema en lo que va en su gobierno como se puede dar cuenta en cada una de sus conferencias matutinas, donde la palabra “corrupción” es la que prevalece por encima de todas las otras.

Solórzano asegura que el presidente supo leer muy bien a la sociedad para saber “que estamos hasta el hartazgo, precisamente de la corrupción y que queremos entrar en una nueva etapa, sin embargo, el gran problema es que la corrupción no ha estado siendo vista bajo una misma mirada”.

“No podemos estar en contra y hay que alentar al máximo la posibilidad de que el caso de Emilio lozoya se convierta en algo importante porque estaría tocando las entrañas de las formas de corrupción del sector público y privado”

Javier Solórzano

El periodista señala que en este caso lo que más sorprende es que existe una discrecionalidad y se presta a pensar el exfuncionario está teniendo una singular detención en la cual sigue “viviendo a sus anchas” porque tiene muchas responsabilidades en los delitos de corrupción que se le imputan, por más que haya personas por encima de él que hayan tomado las decisiones.

Otro caso con el que ejemplifica Solórzano es el del hermano de AMLO que recibió bolsas cafés con dinero.

Porque la lucha contra la corrupción es la frase que define al gobierno actual, sin embargo, este tema en algunas áreas parece que se ha quedado muy en pañales, muy limitado; porque ya empezamos a ver indicios de que en el interior del gobierno hay discrecionalidad para otorgar contratos y otras prácticas que rompen con el discurso que AMLO ha venido manejando desde hace muchos años contra la corrupción.

“No dudo que quiera llevar este proceso contra la corrupción de manera genuina, pero por una parte al presidente no le gusta el aspecto legal,  porqué considera que frena sus acciones, sin embargo, aunque no les gustan las formalidades hay que respetarlas porque las leyes son los elementos consensuales de una sociedad que le dan funcionalidad”

Javier Solórzano

El discurso del presidente López Obrador trae un problema con la palabra “corrupción” y su intención de luchar contra este mal porque cada se encuentra más cerca la terca realidad de ese discurso.

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